
ELÍ URBINA
ELÍ URBINA
(Chimbote, 1989). Licenciado en Letras y Magister en Docencia Universitaria e Investigación Pedagógica. Autor del poemario La sal de las hienas (Plectro Editores, 2017). Una muestra de su obra se encuentra incluida en la antología Plexo Perú, poesía gráfica Perú-Chile (Editorial Quimantú y Casa Azul, Valparaíso, 2014). Ha realizado estudios de diseño gráfico y crítica de arte. Su poesía ha sido traducida al griego, serbio e italiano, y publicada en revistas especializadas como θράκα, Život, Fragment o el mensuario cultural y literario Il Foglio Volante. Fundó y dirige la revista electrónica de poesía Santa Rabia (www.santarabiamagazine.com). Pronto su segundo libro El abismo del hombre verá la luz con la editorial argentina Buenos Aires Poetry.
ELÍ URBINA / DOS POEMAS / TRADUCCIÓN AL FRANCES /
ELÍ URBINA / DOS POEMAS /
Traduction par Miguel Ángel Real
EL FARDO DE LA SOMBRA
Entre los racimos de saliva y sangre
solo el fardo de la sombra
la voz de esa mujer a la que amé
esa reja entre lo que soy
y los nombres del pasado
Todavía hay ansiedad
Aún hay vestigios de algo
que no termino de perder
La muerte se avecina
pero ya estoy en medio de la muerte
ya camino en esa acera
donde la suerte es otra
dimensión de la ironía
otro rostro de su rostro
y hay mensajes perdidos
Tal vez ya es suficiente
Quizá de nada sirve
alzar estas palabras contra la soledad
LE FARDEAU DE L'OMBRE
Entre les grappes de salive et de sang
rien que le fardeau de l'ombre
la voix de cette femme que j'ai aimée
cette grille entre ce que je suis
et les noms du passé
L'anxiété est toujours là
Il y a encore des vestiges de quelque chose
que je n'arrive pas à perdre
La mort approche
mais je suis déjà au milieu de la mort
je marche déjà sur ce trottoir
où la chance est une autre
dimension de l'ironie
un autre visage de son visage
et il y a des messages perdus
C'est peut-être déjà suffisant
Peut-être qu'il ne sert à rien
de dresser ces paroles contre la solitude
(De La sal de las hienas, 2017)
GUARDO HOSPEDADA EN MI MEMORIA
Guardo hospedada en mi memoria
la imagen apacible del cuerpo del amor.
La luz ha de llegar de nuevo,
pero ahora, en lo real, tan solo la lluvia
cubre la calle como negro alpiste.
Mira descender lentamente
la espina de la carne en la herida secreta.
El burdel, su avaricia, sorbe mi alma agotada,
mi esperanza sedienta de sentir,
por un instante, el sordo crepitar.
En penumbra la prostituta baila
con la sinuosidad de una ancha llamarada.
Ya el ansia se amontona en el espejo,
la sombra de mi mano se prolonga.
Por mucho que el placer arda
siempre su rostro en mi interior se enciende.
JE GARDE HÉBERGÉE DANS MA MÉMOIRE
Je garde hébergée dans ma mémoire
l'image paisible du corps de l'amour.
La lumière doit arriver à nouveau
mais maintenant, dans la réalité, seulement la pluie
recouvre la rue comme un noir alpiste.
Regarde descendre lentement
l'épine de la chair dans la blessure secrète.
Le bordel, sa convoitise, gobe mon âme épuisée,
mon espoir qui a soif de sentir,
pour un instant, le crépitement sourd.
Dans la pénombre la prostituée danse
avec la sinuosité d'une vaste flambée.
L'avidité s'entasse déjà dans le miroir,
l'ombre de ma main se prolonge.
Le plaisir a beau brûler,
ton visage s'allume toujours en moi.
(De El abismo del hombre, Buenos Aires Poetry, 2020)